TERAPIA GRUPAL
Compartir con los demás ayuda a ver nuevas formas de dar y recibir, a apoyar y a permitirte ser sostenido.
El grupo es un microcosmos. Es un mundo complejo en sí mismo. Te da la oportunidad de relacionarte con personas muy diversas en un entorno seguro.
Todo lo que ocurre en ese espacio, es aplicable a lo que te sucede fuera. Las experiencias y aprendizajes te ayudarán a afrontar de una forma distinta tu día a día.
Cuando uno experimenta algo así se da cuenta de que en lo profundo no somos tan diferentes. Todos compartimos las mismas necesidades. Y entender cómo cada uno se enfrenta a ellas nos da una visión más amplia y una comprensión más profunda del otro.
Además nos ayuda a entender cómo nos relacionamos con nosotros y con la vida y cómo funcionamos en determinadas situaciones.
Por eso es una terapia tan potente.
En las sesiones se fomenta el respeto por los tiempos de cada uno y su deseo de compartir más o menos según lo sienta en cada momento.

SOY MON ROURA
Mi propósito vital es acompañar a las personas en su proceso terapéutico hacia el autoconocimiento, la felicidad y el despertar espiritual.
Soy miembro titular de la Asociación Española de Terapia Gestalt (AETG)
En las sesiones trabajamos también con otras corrientes como terapia Transpersonal, Terapia Corporal o constelaciones familiares.
CÓMO VAMOS A TRABAJAR
• Cuando se hace una terapia grupal se valoran las necesidades que predominan en ese momento en el grupo y a partir de ahí se establecen unas dinámicas de trabajo.
• Se trabaja desde el respeto a los tiempos de cada uno. Habrá momentos en los que uno esté más participativo y otros menos, y todo vale y todo sirve para trabajar y crecer.
TESTIMONIO DE CLIENTES DE TERAPIAS DE GRUPO


PREGUNTAS FRECUENTES
Claro, puedes asistir solo o si te sientes mejor haciéndolo con algún amigo podeis sin problema. Cada uno hará su trabajo personal igualmente.
Los grupos son espacios seguros donde cada uno viene a trabajar sus cosas, pero aprovecha la fuerza del grupo para hacerlo. Normalmente se crea un clima tan cercano que enseguida se coge confianza. Si aún así no sientes que quieras compartir en alguna dinámica en concreto no hay ningún problema. Se respetan los ritmos y los tiempos de cada persona.
Cuando un grupo hace dinámicas terapéuticas, todos los participantes trabajan algo. Y precisamente el hacerlo con gente diversa hace que apreciemos más que aunque seamos distintos, todos tenemos necesidades similares.
Es una experiencia única. Cuesta ponerle palabras, es de estas cosas que tienes que vivir y experimentar. Destaco la capacidad de Mon de ir adaptando las dinámicas a las necesidades del grupo y de las personas en cada momento para asegurarse de que no quedan temas abiertos que no se puedan sostener por una misma. La energía y la complicidad que se crea en el grupo es simplemente mágica.´